Una de las grandes dificultades en las fases iniciales de la puesta en marcha tras una lesión deportiva, es conseguir que el deportista lesionado pueda reincorporarse a su actividad, sin que su peso corporal sea un obstáculo.
Los ejercicios en piscina (poco específicos de cada deporte) o los diversos recursos para intentar que la carga del peso sea progresiva, han supuesto una adaptación parcial a falta de otras posibilidades.
Ahora ya disponemos de tecnología que nos permite afrontar con total garantía este proceso (http://www.fisiozaragoza.com/).
El sistema antigravitatorio ALTER G está basado en un tapiz rodante, que nos facilita
andar y correr,
con la peculiaridad de poder elegir cuanto peso corporal queremos cargar. Podemos introducir la mitad inferior de nuestro
cuerpo en la cápsula que se encuentra en la parte inferior del aparato y mediante un flujo de aire, vamos modificando la presión intracapsular generando un efecto antigravitatorio que nos permite reducir el efecto del peso sobre nuestras articulaciones desde el 100% hasta un 20%.
Este sistema permite que el paso del reposo a la actividad normal, sea progresivo, pero sobre todo adaptado a la práctica normal del deportista.
La biomecánica del gesto deportivo no se ve afectada acelerando el proceso de readaptación.
Pero no es única la única indicación. Este sistema permite que el deportista con lesiones leves por sobrecarga, puedan seguir corriendo sin repercutir en su lesión, al descargar el peso corporal, disminuyendo su efecto sobre la estructura lesionada, evitando los riesgos del reposo.